Pasar al contenido principal
Se aprobaron este miércoles en el Parlamento Europeo

Europa impulsa nuevas medidas para hacer los envases más sostenibles

El Parlamento Europeo aprobó este miércoles nuevas medidas para hacer los envases más sostenibles y reducir los residuos de envases. El Reglamento, que busca hacer frente al constante aumento de los residuos, armonizar las normas del mercado interior e impulsar la economía circular, se aprobó con 476 votos a favor, 129 en contra y 24 abstenciones.

Las normas exigen reducir la cantidad de residuos de envases de plástico.
Las normas exigen reducir la cantidad de residuos de envases de plástico.

Las normas, que se han acordado provisionalmente con el Consejo Europeo incluyen objetivos de reducción de envases (5% para 2030, 10% de aquí a 2035 y 15% para 2040) y exigen a los países de la Unión Europea que reduzcan, en particular, la cantidad de residuos de envases de plástico. A fin de disminuir los envases innecesarios, se ha establecido una ratio máxima de espacio vacío del 50% para los envases colectivos, de transporte y de comercio electrónico. Además, los fabricantes e importadores también tendrán que velar por reducir al mínimo el peso y el volumen de los envases.

Según expresó la ponente Frédérique Ries (Renew, Bélgica), “por primera vez en una ley mediambiental, la Unión Europea fija objetivos para disminuir el envasado, sin atender al material utilizado. Las nuevas reglas impulsarán la innovación e incluyen exenciones para las empresas más pequeñas”.

Asimismo, señaló que “la prohibición de los químicos ‘eternos’ en los envases alimentarios es una gran victoria para la salud de los consumidores europeos. Ahora apelamos a todos los sectores industriales, los Estados miembro y los consumidores para contribuir a la lucha contra el exceso de envases”.

Tal y como establece la nueva normativa, algunos tipos de envases de plástico de un solo uso quedarán prohibidos a partir del 1 de enero de 2030. Entre ellos, figuran los envases de frutas y verduras frescas sin procesar, los de alimentos y bebidas que se sirven y consumen en cafeterías y restaurantes, los de porciones individuales (para, por ejemplo, condimentos, salsas, crema, azúcar), los envases pequeños de productos de higiene personal y las bolsas de plástico muy ligeras.

Asimismo, con vistas a prevenir efectos nocivos para la salud, el texto incluye la prohibición del uso de las llamadas ‘sustancias químicas eternas’ (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas o PFAS) por encima de ciertos umbrales en los envases en contacto con alimentos.

Reutilización y opción de recarga

La ley fija objetivos específicos de reutilización para 2030 para los envases de bebidas alcohólicas y no alcohólicas (excepto, por ejemplo, leche, vino, vino aromatizado, licores), los envases para transporte y venta, así como los envases colectivos (que incluyen varios productos). En este caso, los Estados miembro podrán conceder una excepción de cinco años a estos requisitos en determinadas condiciones.

Por su parte, los distribuidores finales de bebidas y comida para llevar tendrán que ofrecer a los consumidores la opción de aportar su propio recipiente. Y, además, se les exigirá que se esfuercen por ofrecer el 10% de los productos en un formato de envase reutilizable de aquí a 2030.

Envases reciclables, mejor recogida y reciclado de residuos

Según las nuevas normas, todos los envases (excepto los de madera ligera, corcho, textil, caucho, cerámica, porcelana y cera) tendrán que ser reciclables cumpliendo unos criterios estrictos.

Las medidas también incluyen objetivos mínimos de contenido reciclado para los envases de plástico y objetivos mínimos de reciclado por peso de los residuos de envases.

De aquí a 2029, el 90% de los envases de bebidas de plástico y metal de un solo uso (hasta tres litros) tendrán que recogerse por separado (mediante sistemas de depósito y devolución u otras soluciones que garanticen el cumplimiento del objetivo de recogida).