Carlos Cuerpo, ministro de Economía, Comercio y Empresa participó en el último encuentro ‘LíderesResponsables’ para abordar, entre otros, el compromiso con los desafíos sociales, la innovación como un acelerador del progreso económico y social en medio de la transición justa, así como la reducción de las desigualdades.
Fernando Ruiz, presidente de Fundación SERES, expresó que “el valor social, unido al progreso empresarial, es una garantía para la sostenibilidad de las compañías y contribuye a una empresa más competitiva y una sociedad más justa".
Para Carlos Cuerpo, este compromiso por parte de las empresas está robusteciendo el tejido empresarial. "Observamos un crecimiento empresarial y en este caso no podemos obviar lo social como otro indicador indispensable. En este punto se está demostrando ahora que no hay incompatibilidad entre rentabilidad y sostenibilidad, independientemente del sector", comentó.
Además, aseguró que “la buena marcha del tejido empresarial radica en el empleo femenino en gran medida facilitado por la reforma laboral o el impacto de la subida del salario mínimo interprofesional”. Y, en esta línea, apostilló que “observamos cómo las empresas están respondiendo a estos cambios. En los últimos 10 años también ha subido 10 puntos la presencia de la mujer en los consejos de las empresas cotizadas”.
Carlos Cuerpo, asimismo, insistió en que “nos obsesionan los datos y, cuando analizamos el crecimiento de las empresas, lo hacemos de esta manera. Toda la normativa que está empujando a las empresas a ir más allá de su cuenta de resultados, incluyendo lo social, nos está llevando a una empresa más preocupada por su huella social”.
El actual ministro de Economía, Comercio y Empresa explicó también que “el talento joven es una de las grandes preocupaciones y ocupaciones. Hemos visto que la tasa de paro con los últimos datos de la EPA ha descendido dos puntos en el último año. Aun así, sigue siendo alta en comparación con los datos europeos. Hay que ajustar la demanda de las empresas y la formación específica de los trabajadores. Este mismatch es uno de los grandes retos no sólo en España sino en Europa. La clave está en la formación y transformar nuestro sistema para que pueda aliviar este desajuste”.
Finalmente, en el cierre de la sesión, Fernando Ruiz insistió en que “los ejemplos de empresas que ofrecen resultados tanto económicos como sociales han puesto de manifiesto que generar valor social es posible y se vislumbra como una oportunidad para generar resultados económicos, así como un impacto social positivo”.