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Según un nuevo informe publicado por la ONU

Sólo el 17% de los ODS va por buen camino

El último informe sobre la Agenda 2030 destaca la necesidad urgente de una inversión masiva y un aumento de políticas efectivas para alcanzar sus metas. A pesar de los numerosos avances en áreas como las energías renovables, la situación general es preocupante: más personas padecen hambre en comparación con 2019 y las muertes de civiles en conflictos armados han aumentado dramáticamente.

23 millones de personas más fueron empujadas a la pobreza extrema en 2022.
23 millones de personas más fueron empujadas a la pobreza extrema en 2022.

A sólo seis años de la fecha límite, el progreso hacia los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) está muy por debajo de lo necesario. Según un informe de Naciones Unidas, sólo el 17% de las metas están en camino de ser alcanzadas. Sin un esfuerzo significativo, los objetivos de un mundo más resiliente y próspero seguirán siendo inalcanzables.

“La conclusión es simple: nuestra incapacidad para asegurar la paz, enfrentar el cambio climático e impulsar las finanzas internacionales está socavando el desarrollo”, declaró  António Guterres, secretario general de la ONU durante la presentación del estudio.

Guterres enumeró algunos avances, como el aumento de la paridad en la educación de niños, el aumento del número de mujeres que han conseguido romper el techo de cristal tanto en política como en los negocios, la mejora del acceso a internet, el descenso del número de casos de VIH y el auge de las energías renovables. "Tenemos lo necesario para abrirnos paso hacia un futuro mejor (…) Pero la velocidad y la escala de los cambios necesarios para el desarrollo sostenible siguen siendo demasiado lentas”, añadió Guterres, al tiempo que instó a los países a acelerar las acciones en torno a la paz y las transiciones energética y digital.

Más conflictos, más pobreza 

Según el informe, casi la mitad de los Objetivos de Desarrollo Sostenible muestra un progreso mínimo o moderado y más de un tercio está estancado o retrocediendo. Los efectos persistentes de la pandemia de COVID-19, la escalada de conflictos, tensiones geopolíticas y el cambio climático han obstaculizado gravemente el progreso. En 2022, 23 millones de personas más cayeron en la pobreza extrema y 100 millones más padecieron hambre en comparación con 2019. Además, el número de muertes civiles en conflictos armados se disparó en 2023, un año marcado también por temperaturas globales récord.

Tres prioridades urgentes 

"Este informe pone de relieve la urgente necesidad de una cooperación internacional más fuerte y eficaz para maximizar el progreso a partir de ahora", dijo Guterres. "A falta de más de seis años, no debemos detenernos en nuestra promesa de 2030 de acabar con la pobreza, proteger el planeta y no dejar a nadie atrás", añadió. 

En el documento, además, se destacan tres prioridades urgentes: financiar el desarrollo, ya que el déficit de inversión en los ODS en los países en desarrollo asciende a cuatro billones de dólares al año. Es crucial reformar la arquitectura financiera mundial para desbloquear los recursos necesarios. Asimismo, destaca la paz y seguridad, el número de desplazados forzosos ha alcanzado niveles sin precedentes. Resolver los conflictos mediante el diálogo y la diplomacia es esencial. También hace hincapié en que las inversiones y asociaciones sean efectivas, como impulsar transiciones en alimentos, energía, protección social y conectividad digital. 

Algunos avances frente a otros retrasos 

El estudio destaca que la capacidad mundial de generación de electricidad a partir de energías renovables ha comenzado a expandirse a un ritmo sin precedentes, con un crecimiento anual del 8,1% durante los últimos cinco años. No obstante, los niveles de deuda externa se han mantenido en niveles sin precedentes en los países de desarrollo. Alrededor del 60% de los países de renta baja corre un alto riesgo de sobreendeudamiento o ya lo están experimentando, lo que limita su capacidad de financiar la acción climática. 

Además, por primera vez en este siglo, el crecimiento del PIB per cápita en las naciones más vulnerables es más lento que en las economías avanzadas. También, las temperaturas récord de los océanos y la falta de leyes que prohíban la discriminación de la mujer en muchos países son también preocupantes.

En relación con la eliminación de la violencia contra la mujer, según los datos recogidos en 2022 en 120 países, más de la mitad de ellos carecían de leyes que prohíban la discriminación de la mujer. Los avances en educación siguen siendo muy preocupantes ya que sólo el 58% de los estudiantes de todo el mundo alcanza un nivel mínimo de competencia en lectura al final de la escuela primaria.