En la sede de la ONU, casi siempre hay algo que celebrar o conmemorar. Su lista de días internacionales ronda ni más ni menos que los 150. Alguno condensa la repulsa de la comunidad internacional a la mutilación genital femenina; otros muestran respeto a la poesía, al yoga o al personal de paz de la ONU, y otros tantos recuerdan a las víctimas de atrocidades como la esclavitud o el genocidio cometido en Rwanda.
Cualquier acontecimiento digno de mención tiene cabida en este calendario. ¿Quién los designa? Según indica la propia ONU en el blog de la organización, por lo general son los estados miembros quienes proponen estas conmemoraciones, y es la Asamblea General quien las aprueba mediante una resolución. La que señala el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, por ejemplo –uno de los más populares de Naciones Unidas, que se conmemora, por cierto, cada 25 de noviembre–, consta de siete páginas, e “insta a que se hagan todos los esfuerzos posibles para que la declaración sea universalmente conocida y respetada”.
Generalmente, son los estados miembros quienes los proponen y la Asamblea General la que los aprueba
En todo caso, cualquier colectivo puede proponer que se designe un día en defensa de su causa. El único requisito, según explica Carlos Jiménez, director de Información de las Naciones Unidas para España y Andorra, es que “lo pida a su Gobierno y consiga que éste lo eleve a las Naciones Unidas”.
¿Quién elige el día?
La elección de una fecha también compete, por lo general, a la Asamblea General. En sus resoluciones, este órgano suele hacer una descripción de la situación que le impulsa a decantarse por una determinada, y no por otra.
El Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, por ejemplo, se celebra cada 21 de marzo para recordar que aquel mismo día del año 1960 tuvo lugar en Sudáfrica la llamada “Masacre de Shaperville”, en la que 69 personas que participaban en una concentración pacífica contra el apartheid fueron asesinadas.
¿Sirven para algo?
El motivo difiere según el caso pero, por lo general, estos días tratan de “sensibilizar, concienciar y llamar la atención” sobre un asunto concreto y “señalar la existencia de un problema sin resolver en la sociedad” para que, así, “los gobiernos y los estados actúen y tomen medidas” y los propios ciudadanos “lo exijan a sus representantes”.
En otras ocasiones, la ONU aprovecha estas declaraciones para incidir en algún aspecto que preocupe específicamente a los estados miembros. La que designa el 23 de junio como Día Internacional de las Viudas, por ejemplo, llama la atención sobre la extrema vulnerabilidad en que sume esta condición a millones de mujeres de todo el mundo. Estigmatizadas, abandonadas por las autoridades locales y nacionales e, incluso, por las organizaciones de la sociedad civil, las viudas de numerosos países se ven abocadas a situaciones de aislamiento y abusos de los que solo escapan si acceden a casarse con uno de los parientes de su esposo. Y eso, normalmente, en contra de su voluntad.
Otras veces, Naciones Unidas designa un día para “mostrar el camino a los estados”, indicando “las acciones que deben adoptar en la búsqueda de solución a los problemas”. Así ocurre en la resolución sobre el Día Internacional de la Diversidad Biológica, en virtud de la que cada 22 de mayo la ONU invita a sus miembros a ratificar y firmar el Protocolo de Cartagena sobre seguridad de la biodiversidad.
Y, en último término, este calendario sirve también “de termómetro” a la ONU para conocer cuál es el interés que despierta un asunto en una determinada región. Porque, por extraño que parezca, la popularidad de cada día internacional varía por regiones e idiomas. Una curiosidad: en América Latina y España, los días que más atención atraen son los dedicados a Nelson Mandela (18 de julio), a la Mujer (8 de marzo) y al Agua (22 de marzo).
“Constituyen una oportunidad única para concienciar y que se hable de un tema. Una herramienta más para tratar de avanzar y para pasar el testigo a la sociedad civil y, desde luego, ¡mejor que mantenernos callados! El silencio no lleva a ninguna parte”, señala Jiménez.
Internacionales versus mundiales
¿Qué diferencia hay entre los días internacionales y los mundiales?, preguntan muchos internautas a la ONU a través de su blog. Su respuesta es, siempre, que “casi ninguna”. “Por lo general”, apunta Jiménez, el día mundial “defiende causas que requieren de la actuación de la sociedad civil”, mientras que ‘resolver’ el internacional “suele ser responsabilidad de gobiernos o colectivos específicos”.
Y, si los primeros son decididos por la Asamblea General de las Naciones Unidas, los segundos son propuestos por las agencias adheridas al sistema de la organización. El Día Mundial de la Poesía, por ejemplo, que se celebra el 21 de marzo, está bajo la tutela de la Unesco, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, mientras que el de la Alimentación, que se conmemora cada 16 de octubre, es auspiciado por la FAO.