
Mayo es el mes de las bodas. Pero este año, las parejas no solo están diciendo "sí, quiero" a sus seres queridos, sino también al planeta. Las bodas sostenibles están en auge, y no es difícil entender por qué. Con un poco de creatividad y planificación, es posible celebrar un día inolvidable sin dejar una huella ecológica.
Empezamos por las invitaciones de boda. Imagina recibir una que no solo es elegante, sino también respetuosa con el medio ambiente. Las invitaciones de papel reciclado o incluso digitales están ganando mucha popularidad. No solo ahorran árboles, sino que también pueden ser tan elegantes y personalizadas como las tradicionales. Y a los invitados les gustará ese detalle.
Otro de los aspectos que más nos suele costar decidir es el lugar de la ceremonia. Optar por un espacio al aire libre, como un jardín o una playa, no solo reduce la necesidad de iluminación artificial, sino que también proporciona un escenario natural impresionante. Además, muchos lugares ahora ofrecen opciones de energía renovable para alimentar el evento. A la hora de ver diferentes lugares, escoger uno en función de si cuenta con paneles solares puede decantar la balanza.
Vestido de novia y decoración
Y llegamos posiblemente a la parte que más quebraderos de cabeza da… al menos para ellas: el vestido de novia (y el traje del novio). ¿Pueden ser sostenibles? Desde vestidos de segunda mano hasta trajes hechos con materiales orgánicos, hay muchas maneras de lucir espectacular sin sacrificar la ética. Incluso algunas diseñadoras están creando colecciones de moda nupcial ecológica que son tan deslumbrantes como cualquier otra.
Otro de los aspectos que más luce en una boda es la decoración. Aquí también puede brillar la sostenibilidad. Flores locales y de temporada, centros de mesa reutilizables y decoraciones hechas a mano son solo algunas de las opciones que tenemos a nuestra mano. Y no olvidemos las luces LED, que no solo son eficientes energéticamente, sino que también crean un ambiente mágico.
Banquete
Algo que, sin duda, siempre recuerdan los invitados es el banquete. Aquí es donde una boda puede destacar sobre las demás, siendo respetuosa con el medio ambiente. Por ejemplo, optar por un menú de origen local y de temporada no solo apoya a los agricultores locales, sino que también reduce la huella de carbono.
Además, los menús vegetarianos o veganos están ganando popularidad, no solo por sus beneficios ambientales, sino también por ser deliciosos. Y no olvidemos el pastel de bodas, que puede ser hecho con ingredientes orgánicos y decorado con flores comestibles.
¿Y las bebidas? También pueden ser sostenibles. A nuestra disposición tenemos desde vinos orgánicos hasta cócteles con ingredientes locales.
Huella de carbono
El transporte es uno de los aspectos más críticos y contaminantes de una boda. La movilidad de los invitados puede generar una considerable huella de carbono. De hecho, el transporte es responsable de una gran parte de las emisiones de gases de efecto invernadero en eventos como las bodas.
Por esa razón, alentar a los invitados a compartir coche o proporcionar transporte colectivo puede reducir significativamente las emisiones. Y, para los más aventureros, ¿qué tal llegar a la ceremonia en bicicleta o incluso a pie? Estas opciones no solo son ecológicas, sino que también añaden un toque único y memorable al día.
Los recuerdos de boda también pueden ser sostenibles. En lugar de los tradicionales recuerdos de plástico, considera regalar plantas en macetas, semillas para plantar o productos hechos a mano por artesanos locales. Estos regalos no solo son ecológicos, sino que también tienen un significado especial.
En resumen, una boda sostenible no solo es posible, sino que también puede ser tan mágica y especial como cualquier otra. Con un poco de planificación y creatividad, las parejas pueden celebrar su amor de una manera que respete y proteja el planeta. Así que, este mayo, cuando digas "sí, quiero", hazlo también por el medio ambiente.