Según los últimos datos de la Organización Mundial de la Salud, el cáncer es una de las principales causas de muerte en todo el mundo y representó casi 10 millones de fallecimientos en 2020. Ante esta problemática, la OMS estableció el 4 de febrero como el Día Mundial Contra el Cáncer como una forma de apoyo a la Unión Internacional de lucha contra el Cáncer en la promoción de distintas maneras de disminuir la carga mundial de esta enfermedad.
En el año 2024, la Organización Panamericana de la Salud conmemora este día bajo el lema “por unos cuidados más justos” y se une a un llamado para comprometerse y fortalecer las acciones dirigidas a mejorar la atención de calidad.
En el marco de este día, a continuación, se exponen los tipos de cáncer más comunes y que afectan a millones de personas, puesto que es importante conocerlos, así como saber reconocer sus posibles síntomas ya que muchos pueden curarse si se detectan a tiempo y se tratan eficazmente.
Cáncer de mama
Este tipo es el más común en dicha enfermedad. Según la OMS, el año 2020, se diagnosticó cáncer de mama a 2,3 millones de mujeres y 685 000 fallecieron por esta enfermedad. Sin embargo, 7,8 millones de mujeres a las que en los cinco años anteriores se les había diagnosticado seguían con vida, lo que lo convierte en el de mayor prevalencia en el mundo.
Aproximadamente, la mitad de todos los casos de cáncer de mama afectan a mujeres que no tienen factores de riesgo específicos aparte del sexo y la edad, mientras que solamente entre el 0,5% y el 1% de los afectados son varones. Esto supone que pertenecer al género femenino es el principal factor de riesgo para padecerlo.
Existen diversos factores que aumentan las posibilidades de adolecer de esta enfermedad, entre los que se encuentran el envejecimiento, la obesidad, el consumo perjudicial de alcohol, los antecedentes familiares de cáncer de mama, el historial de exposición a radiación, el historial reproductivo, el consumo de tabaco y tratamientos hormonales posteriores a la menopausia.
Mientras que los signos y los síntomas más comunes para identificarlo son la aparición de nódulos o engrosamiento en el seno; cambio en su tamaño, forma o aspecto; surgimiento de hoyuelos; enrojecimiento; grietas u otros cambios en la piel; cambio en el aspecto del pezón o la piel circundante; y secreción de líquido anómalo o sanguinolento por el pezón.
Cáncer de pulmón
El cáncer de pulmón es una de las principales causas de muerte relacionada con el cáncer en todo el mundo y representa las tasas de mortalidad más altas tanto entre hombres como entre mujeres.
Esta enfermedad comienza cuando células anormales crecen de forma descontrolada en los pulmones, de forma que los síntomas más comunes son tos que no desaparece, dolor en el pecho y dificultad para respirar.
El cáncer de pulmón es un gran problema de salud pública y causa un número importante de muertes en todo el mundo. Según los datos elaborados por la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), este tipo sigue siendo la principal causa de muerte con alrededor de 1,8 millones de muertes en 2020.
La prevención es vital y entre las principales medidas por las que se pueden optar para intentar evitar esta enfermedad se encuentran no fumar tabaco, evitar el humo de segunda mano, la contaminación del aire e intentar protegerse si se trabaja con productos químicos y asbesto.
Cáncer de colon y recto
La OMS establece el cáncer colorrectal como el tercer tipo más frecuente en el mundo. Éste representa alrededor del 10% de todos los casos de cáncer y es la segunda causa de muertes relacionadas con esta enfermedad en el mundo.
Afecta en gran medida a las personas de mayor edad, pues la gran mayoría de casos se encuentran a partir de los 50 años. A pesar de ello, existen varios factores que contribuyen a su aparición, como puede ser una alta ingesta de carnes procesadas y una baja ingesta de frutas y verduras, el sedentarismo, la obesidad, el tabaquismo y el consumo excesivo de alcohol.
En contraposición, la incidencia y el impacto del cáncer colorrectal pueden reducirse a través de estrategias de prevención primaria, como la adopción de un modo de vida sano y la reducción de los factores de riesgo, además de hacer ejercicio con regularidad, así como con la detección precoz mediante el cribado. Mientras que los síntomas más frecuentes para detectarlo son diarrea, estreñimiento, sangre en las heces, dolor abdominal, pérdida de peso sin causa aparente, cansancio y concentraciones bajas de hierro.
Según señala la Organización Mundial de la Salud, se estima que de aquí a 2040, la carga del cáncer colorrectal aumentará a 3,2 millones de casos nuevos por año, lo que supone un incremento del 63%, y a 1,6 millones de muertes por año, suponiendo un crecimiento del 73%. Estas cifras se pueden reducir gracias a los programas eficaces de cribado. El pronóstico del cáncer colorrectal varía según su estadio en el momento del diagnóstico, por lo que es de vital importancia que éste sea oportuno y en fase inicial.
Cáncer de próstata
Alrededor de todo el mundo, se estima que aproximadamente 1.414.000 personas sufrieron este tipo de enfermedad en 2020. El cáncer de próstata es el más frecuente en los hombres, además del cáncer de piel.
Según señala la Asociación de Cáncer de Próstata, cada año se diagnostican más de 25.000 nuevos casos en España, frente a los 899.000 casos que se diagnostican cada año en el mundo. En nuestro país, el cáncer de próstata es el más frecuente en hombres durante los últimos dos años.
La detección temprana de esta enfermedad permite reducir la mortalidad y mejorar la calidad de vida de las personas que lo padecen. Por ello, se recomienda que todos los varones mayores de 45 años que presenten factores de riesgo se realicen las pruebas de detección temprana del cáncer de próstata.
Cáncer de piel
El cáncer de piel es el quinto tipo más común en esta enfermedad. Dentro de éste se encuentran tres variantes: el carcinoma de células escamosas, carcinoma de células basales y melanoma. Este último es mucho menos común que los otros tipos de cáncer, pero a su vez es más probable que invada el tejido cercano y se expanda a otras partes del cuerpo, de tal forma que causa la mayoría de las muertes por cáncer de piel.
Este cáncer puede presentarse en cualquier lugar del cuerpo, sin embargo, las zonas más comunes son aquellas expuestas a la luz solar, como la cara, el cuello, las manos y los brazos. De esta forma, según un estudio elaborado de forma conjunta entre la OMS y la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cerca de un tercio de las muertes por cáncer de piel no melanomatoso se debe al trabajo bajo el sol.
El estudio también señala que 1.600 millones, o el 28% de las personas en edad de trabajar, estuvieron expuestas a la radiación solar ultravioleta en 2019 al desempeñar su labor. De ellas, 19.000 murieron debido al cáncer de piel no melanomatoso sólo en ese año. Esto se traduce en que una de cada tres muertes por cáncer de piel se debe al trabajo bajo el sol, por lo que la OMS subraya la necesidad de adoptar medidas para proteger a los trabajadores.
Cáncer de estómago
Durante 2020, último año en que la OMS actualizó sus datos, 1,09 millones de personas sufrieron este tipo de cáncer. Esta enfermedad se atribuye a cualquier tumor maligno que surge de las células de alguna de las capas del estómago, mayoritariamente en la mucosa, siendo el adenocarcinoma el más frecuente.
A nivel mundial, en 2020, el cáncer de estómago fue el sexto más frecuente, lo que supuso el 6% de los tumores mundiales causantes de 768.793 muertes. En España, durante el año 2022, este padecimiento fue diagnosticado a cerca de 6.913 personas.
Además, existen varios factores de riesgo para desarrollar cáncer gástrico entro los que se encuentran los factores nutricionales, como son las dietas muy ricas en salazones y ahumados, la mala preparación de los alimentos, la falta de refrigeración y las aguas en mal estado y el consumo de tabaco y alcohol.