Con Natalia Rodríguez al frente, Saturno Labs ha conseguido hitos como ser para Amazon una de las mejores empresas de innovación del mundo y asociarse en diferentes proyectos. Este laboratorio nació en 2018 con el fin de que las nuevas tecnologías, y especialmente la inteligencia artificial, ayudaran a las personas aportando soluciones reales a sus necesidades. Desde entonces la startup no ha dejado de investigar y lanzar productos y servicios en campos como el de la tecnología aplicada a la salud o a la accesibilidad.
"En España tenemos muy buenos talentos, gente muy formada con mucho potencial, pero nos falta infraestructura"
¿Puede decirse que España está en un buen nivel en cuanto a desarrollo tecnológico?
En España tenemos muy buenos talentos, gente muy formada con mucho potencial que no tiene nada que envidiar a los de ningún país, pero nos falta infraestructura o medios en comparación con otros lugares. Para hacer grandes desarrollos tecnológicos se suele necesitar mucho capital, especialmente si son investigaciones sin un modelo de negocio claro todavía, y ahí competimos en inferioridad. De todas formas siempre hay casos de éxito de personas o empresas que han logrado superar esas barreras con esfuerzo y con su buen hacer, y ahora mismo son referentes mundiales en sus ámbitos.
¿Qué opina sobre el sector tecnológico en relación a presencia de mujeres y a reconocimiento de talento femenino?
Creo, y lo dicen los datos, que a día de hoy la presencia femenina en algunas ramas técnicas es muy minoritaria. Hay numerosos estudios, programas y campañas para revertir la situación, pero es cierto que los números últimamente no están mejorando.
¿Quizás porque existen todavía obstáculos y reticencias para que las estudiantes femeninas opten por carreras STEM?
Pienso que esta situación es compleja y como tal habrá situaciones y contextos muy diferentes. Es obvio por los datos que algo ocurre y es en lo que se están centrando los estudios, pero por otro lado creo que, ahora mismo, si una chica quiere estudiar ingeniería puede elegirlo libremente. Y ese avance ya es muy importante. Supongo que hay circunstancias que depende de cómo seas te influirán más o menos: por ejemplo, el trabajar o estudiar con equipos en los que eres la única mujer, pero como digo, creo que los problemas complejos tienen análisis complejos.
¿Alguna vez en su trayectoria ha influido de alguna manera su condición de mujer?
Desde pequeña he vivido en mundos muy masculinizados (deporte profesional, ingeniería, empresa deep tech), siendo a veces la única chica. Llega un punto en el que te acostumbras, lo normalizas, cuando no deberías, y a veces te sirve para destacar. Pero como todo, eso tiene sus pros y sus contras. Yo he tenido la suerte de poder desarrollar mi carrera como he querido y no he tenido ningún impedimento para ser quien quería ser.
"La semilla de Saturno Labs se produce durante una temporada en la que tuve que pasar mucho tiempo en un hospital. Me cambió la percepción del mundo"
¿Cómo se define Saturno Labs?
La semilla de Saturno se produce durante una temporada en la que tuve que pasar mucho tiempo en un hospital. Me cambió la percepción del mundo y me di cuenta que quería dedicar mi vida a ayudar a los demás a través de la tecnología. También pensaba que había mucho camino por recorrer en el ámbito de las tecnologías más punteras y en cómo llevarlas a soluciones reales. Y así surge Saturno Labs. Somos un laboratorio de innovación en el que investigamos y creamos productos y servicios con las tecnologías más punteras de los papers (inteligencia artificial, procesado de señal y de voz, chatbots, producción de sonido en 3D...) con el objetivo de democratizar este tipo de tecnología para que llegue a todo el mundo y con la mirada puesta en ayudar a los demás en ámbitos como la medicina, la psicología o la accesibilidad.
¿Puede la Inteligencia Artificial mejorar la vida de las personas?
Ese es uno de nuestros objetivos principales en Saturno Labs. Hay numerosos campos de aplicación de la inteligencia artificial: desde automatizar procesos repetitivos que no aportan valor, analizar datos de una manera más potente o hasta ofrecer numerosos servicios que nos hacen la vida más cómoda en el día a día. En cuanto a sectores, hay mucho por hacer especialmente en la rama sanitaria, en accesibilidad, en bienestar o incluso en la administración pública.
¿En qué consiste su colaboración con Amazon?
Tenemos relación con Amazon a tres niveles. En España, estamos trabajando con ellos directamente en proyectos conjuntos. En Europa hemos sido elegidos por ellos como una de las 10 mejores empresas de innovación y voz del continente para participar en una campaña internacional. Y a nivel global, nos han escogido como uno de los 9 mejores grupos de investigación en inteligencia artificial del mundo para participar en una competición millonaria e investigar para Amazon en USA.
"Al inicio de la pandemia, en plena crisis sanitaria, se innovó por pura supervivencia"
Obviamente va a ser una vía muy importante, pero no va a ser la única. La tecnología permite tener mucho alcance, facilitar muchos trámites o situaciones y poder abrir nuevas líneas de negocio, pero no llega a todas partes. Podrá ser un eje que refuerce otras acciones.
¿Otro camino es necesariamente el de la sostenibilidad?
Creo que vamos efectivamente hacía un mundo más sostenible. Los usuarios o consumidores cada vez están más concienciados con estos temas y las empresas e instituciones están tratando de dar respuesta a esas inquietudes de diferentes formas.
¿Cómo valorar en términos de innovación la forma en que el tejido empresarial español ha reaccionado ante la crisis del Covid-19: teletrabajo, e-commerce, etc.?
Creo que como tal, no ha habido mucha 'innovación', en cuanto a cosas realmente novedosas. Hay empresas que sí que han tenido que acelerar su proceso de digitalización, que han tenido que pasar a remoto y habilitar esas tecnologías, pero casi todo han sido mejoras en procesos que ya existían de alguna u otra forma, lo cual por otra parte es muy bueno. Donde se vio más innovación fue al inicio de la pandemia, en plena crisis sanitaria, y se hizo por pura supervivencia en proyectos como los respiradores que plantearon algunos 'makers' o el uso de gafas de piscina para conectar las bombonas de oxígeno.