Barcelona vuelve a ser durante cuatro días la capital del mundo de la telefonía móvil. El MWC reunirá a más de 2.400 expositores, presentaciones de nuevos productos, conferencias especializadas y trabajo en red. La organización del congreso ha marcado ocho grandes líneas temáticas para esta edición que van desde la conectividad (5G) hasta la industria 4.0 pasando por la inteligencia artificial. Pero junto a la reflexión sobre las tecnologías disruptivas, la agenda incluye algunas preocupaciones sociales muy extendidas y, sin embargo omite otras.
Adicción digital
Una de estas áreas temáticas está enfocada a la preocupación por la naturaleza adictiva de la tecnología y sus efectos sobre la salud mental. Los organizadortes del evento señalan a través de la web oficial, que la digitalización afecta a cada aspecto de nuestras vidas, principalmente a través de nuestros smartphones. Asimismo admiten que “las conexiones digitales pueden tener una vertiente adictiva si no se saben utilizar”. Por tanto, “el concepto de bienestar digital va a ser cada vez más importante para que la tecnología no acabe con nosotros”.
“El concepto de bienestar digital va a ser cada vez más importante para que la tecnología no acabe con nosotros”, dicen desde el MWC2019
Otro tema que será sometido a reflexión es el de la confianza digital y la privacidad. Es una preocupación que ha crecido a raíz de los últimos escándalos sobre la uso fraudulento de datos en los que se han visto involucradas grandes compañías como Facebook y que han erosionado la confianza en el ecosistema digital. En los últimos tiempos se ha aprobado legislación sobre privacidad y las grandes compañías se han visto en la necesidad de adoptar códigos éticos en relación con la tecnología Big Data y la inteligencia artificial.
El MWC 2019 también tratará de otear el futuro. ¿Cómo será el negocio de las tecnologías móviles dentro dentro de 10 años y más allá? En este sentido, expertos se preguntarán por otro aspecto de gran relevancia social: si los próximos avances serán inclusivos y accesibles para toda la población mundial.
El futuro de la tecnología
Estas preocupaciones de calado social se han incluido entre las grandes líneas temáticas del evento que en su mayoría se centran en los últimos avances de las tecnologías disruptivas. En materia de conectividad, no cabe duda de que la irrupción de la tecnología 5G va a revolucionar la telefonía móvil. En el evento se hablará de las nuevas posibilidades de esta tecnología, las vías de negocio y regulación internacional.
Asimismo, se abordará en varias charlas cómo los sistemas de inteligencia artificial están cambiando nuestras vidas y los nichos de negocio. Con un mercado proyectado para alcanzar los 70.000 millones de dólares en 2020, la inteligencia artificial está preparada para tener un efecto transformador en los consumidores, empresas y gobiernos de todo el mundo.
Los últimos escándalos sobre la uso fraudulento de datos han erosionado la confianza en el ecosistema digital
El prorama incluye también algunas conferencias sobre los contenidos inmersivos, que permitirán a los usuarios vivir experiencias en primera persona si quieren jugar o conocer mejor un lugar. Por otra parte, la extensón de internet de las cosas (IoT) y la ciberrobótica están cambiando el modelo de producción industrial clásico. En este apartado los ponentes hablarán de los nuevos desafíos de esta industria, denominada 4.0.
Hay otra serie de conferencias que tratarán sobre las opciones de futuro y los cambios que se avecinan. Las innovaciones disruptivas marcan la diferencia entre modelos de negocio, por ello las empresas deben estar muy atentas y ser ágiles para identificar los cambios y adaptarse a ellos.
Sostenibilidad, la gran ausente
La preocupación por el futuro del sector de la telefonía móvil parece ceñirse únicamente a los aspectos puramente tecnológicos pero se echa en falta una reflexión sobre la sostenibilidad. Ninguna de las líneas temáticas del MWC2019 hace alusión a este aspecto esencial para la supervivencia del negocio en los próximo años.
Ninguna de las líneas temáticas del congreso se ocupa de la sostenibilidad, un aspecto esencial para la supervivencia del negocio en los próximo años
En la telefonía móvil predomina hoy día un modelo lineal de producción y consumo. Miles de millones de productos se fabrican, se venden y se desechan cada año lo cual genera pingües beneficios a los fabricantes a corto plazo. Pero este modelo no es sostenible a largo plazo. Los residuos electrónicos crecen a un ritmo tres veces superior al resto de la basura doméstica, y se estima que alcanzarán los 52,2 millones de toneladas en 2021.
Solo el 20 por ciento de estos residuos se recicla de forma adecuada, pese a contener materiales de alto valor. Por ello, la transición del modelo lineal a la economía circular, que reduzca la producció y empiece a tratar los residuos como recursos, es un reto urgente en la industria de los smartphones.
También ha quedado inexplicablemente ‘fuera de programa’ en esta edición del Mobile World Congress el candente asunto de la descarbonización del sector y la lucha contra el cambio climático. La mayoría de las compañías fabricantes de móviles y tablets siguen operando con energías sucias y un estudio de Greenpeace concluyé que 17 de estas compañías generaron en un año más de 100 millones de toneladas métricas de CO2.