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Pilar García Ceballos, presidenta de la Asociación Española de Fundaciones

“La sociedad del bienestar no se entendería sin las fundaciones”

¿Cómo será la filantropía del futuro? En el foro DEMOS 2024 se ha reflexionado sobre los nuevos retos sociales a los que se enfrentarán los filántropos del futuro. Desde Soziable, como media partner, hemos entrevistado a una de las personas que ha estado detrás de la organización este foro, Pilar García Ceballos, presidenta de AEF.

Pilar García Ceballos, presidenta de la Asociación Española de Fundaciones
Pilar García Ceballos, presidenta de la Asociación Española de Fundaciones

Como presidenta de la Asociación Española de Fundaciones (AEF), posee una visión global de la actividad de las Fundaciones en la sociedad española. ¿Qué papel que desempeñan las Fundaciones dentro de la sociedad? ¿Por qué son tan necesarias?

Las fundaciones son fundamentales porque canalizan muchos recursos y conocimientos hacia sectores vulnerables y, además, articulan y fortalecen la representación de la sociedad civil. Las fundaciones son complementarias ayudando al sector público y, muchas veces, ocupan el lugar de lo público porque este ni siquiera llega con los recursos que tiene. 

Es importante recordar que no hablamos de un sector pequeño. Está formado por 10.511 fundaciones activas, genera empleo para 589.000 personas, tiene un impacto económico estimado en 27.000 millones de euros, lo que supone el 2,4% del PIB español, atiende a unos 40 millones de beneficiarios y realiza actividades en ámbitos diversos de interés general.

Antes de continuar, hay que detenerse en el importante trabajo realizado por la Asociación. ¿Qué labor que realiza AEF en la promoción y apoyo a las fundaciones españolas?

La AEF tiene casi 1.000 fundaciones asociadas y, por número, somos la segunda asociación de fundaciones de Europa. Ese apoyo a todas ellas lo damos a través de varias vías. En primer lugar, por ejemplo, representamos al sector fundacional a todos los niveles y mantenemos una interlocución constante con los poderes públicos y con otras organizaciones de la sociedad civil. Además, contribuimos a fortalecer al sector mediante el asesoramiento y poniendo a su disposición guías y recursos de interés. 

Organizamos muchísimas actividades formativas, incluidas las dirigidas a directivos y patronos de fundaciones, cuya labor gratuita es fundamental. Y, por supuesto, intentamos hacer llegar a los medios de comunicación los frutos del esfuerzo del trabajo fundacional para que los ciudadanos lo conozcan. Es verdad que los ciudadanos lo tienen presente porque lo ven y lo viven en su día a día, pero no está de más ponerlo en valor en los medios. 

"La AEF tiene casi 1.000 fundaciones asociadas, somos la segunda asociación de fundaciones de Europa"

Acaba de tener lugar DEMOS 2024, un evento organizado por la Asociación Española de Fundaciones (AEF) que permite a las fundaciones dar a conocer sus proyectos y poner en valor iniciativas para mejorar nuestra sociedad. ¿Cómo ha visto esta nueva edición?

En esta octava edición de Foro Demos se ha reflexionado sobre los filántropos del futuro, es decir, los jóvenes con la vista puesta en los retos sociales que conciernen a todas las generaciones: salud, bienestar, cambio climático, tecnología, futuras estructuras sociales e institucionales. Se ha explorado el papel de las fundaciones para reforzar el diálogo y la solidaridad intergeneracional. 

Foro Demos, además de ser un evento único y de referencia en el sector fundacional, es sobre todo un lugar de encuentro donde una vez al año nos reunimos quienes trabajamos en el sector para conocer qué hacen nuestros compañeros, intercambiar ideas e inspirarnos unos a otros. Y, por supuesto, queremos contarle a la sociedad nuestros proyectos porque, al fin y al cabo, trabajamos para ella.

Este año Demos se ha celebrado por primera vez fuera Madrid, porque somos la asociación de las fundaciones de todos los territorios de España. 

El cuidado de la salud mental, especialmente de los jóvenes, ha sido uno de los temas protagonistas en DEMOS 2024. ¿Qué relevancia tiene el papel de las fundaciones en la protección de los jóvenes ante esta amenaza cada vez más preocupante?

Las fundaciones juegan un papel crucial en la protección de la salud mental de los jóvenes porque promueven programas de prevención, apoyo emocional y acceso a recursos de salud mental. Pueden influir en políticas públicas y crear alianzas para abordar esta problemática de manera integral. Además, sensibilizan a la sociedad y promueven un entorno seguro y de apoyo para que los jóvenes se enfrenten a los desafíos emocionales. 

En eventos como Foro Demos, se puede visibilizar y reforzar la relevancia de estas acciones e intentamos fomentar un diálogo abierto y colaborativo entre distintos actores sociales para diseñar estrategias efectivas que respondan a las necesidades de los jóvenes.

"Las fundaciones juegan un papel crucial en la protección de la salud mental de los jóvenes porque promueven programas de prevención y pueden influir en políticas públicas"

La organización de este tipo de foros es, indudablemente, fundamental para dar difusión a las iniciativas y conseguir así el apoyo de las empresas y las instituciones. ¿Ha alcanzado la responsabilidad social la relevancia suficiente en la toma de decisiones?

Aunque ha habido avances, la responsabilidad social aún no tiene la relevancia necesaria en la toma de decisiones de muchas empresas e instituciones. Es crucial que estos actores la integren plenamente en sus estrategias para enfrentar, por ejemplo, los desafíos sociales y ambientales. 

Eventos como este Foro Demos ayudan a visibilizar su importancia, pero aún queda un largo camino por recorrer para que la responsabilidad social sea una prioridad real en todos los sectores.

Muchas fundaciones acuden a la AEF para contar con una gran asociación detrás a la hora de solicitar el apoyo a las instituciones públicas. ¿Cómo valora el apoyo público actual a las iniciativas impulsadas por las Fundaciones? 

En cuanto al apoyo financiero público, a veces se echa en falta que las convocatorias de proyectos se ajusten más a la realidad de las fundaciones. Por ejemplo, durante la pandemia tuvimos que defender que las fundaciones podían beneficiarse de las ayudas del ICO. Somos fundaciones, pero entramos en el concepto de pymes. Hemos visto también algunos intentos de exclusión de las fundaciones de ciertas convocatorias públicas.

Pero más importante es el papel que desempeñan las administraciones públicas como supervisoras de las fundaciones. Aquí hay mucho que trabajar aún. En algunos protectorados y registro se acumulan retrasos en la revisión de las cuentas anuales, o se exceden los plazos de resolución, lo que resulta tremendamente perjudicial para las fundaciones. Por eso estamos abogando por una modernización del modelo de supervisión y sensibilizando a los responsables políticos sobre la importancia de esta tarea, para que se doten de recursos. Solo entre todos podemos mejorar el sector. Nosotros no podemos hacerlo solos. 

Ahora se ha abierto un proceso de consulta pública para poner en marcha el Consejo Superior de Fundaciones, que es un órgano consultivo y de coordinación entre todas las comunidades autónomas y el Estado y el sector. Está previsto desde 1994 y se recogió también en la Ley vigente de fundaciones y nunca se ha puesto en marcha. Esperamos que esta vez sí.

"Abogamos por una modernización del modelo de supervisión de las administraciones públicas"

Centrándonos un poco más en su función de liderazgo dentro de la AEF, ¿qué retos debe afrontar la asociación de manera más inmediata? 

Tenemos muchos retos por delante. Por mencionar algunos: queremos mejorar, como se ha dicho, las relaciones institucionales con todos los poderes públicos y poner en marcha todo lo que la sociedad civil espera de las fundaciones. 

Otro punto importante es fomentar las alianzas para reforzar las actividades que hacemos, también con otras entidades del tercer sector, de la economía social o del sector privado; también el desarrollo de la filantropía y el mecenazgo, como ha hecho la nueva ley a nivel nacional. 

Estamos trabajando bastante el tema de la sostenibilidad financiera de las fundaciones, es decir, asegurar la financiación y la captación de fondos; y, por último, la transformación digital, evolucionar junto a las revoluciones tecnológicas. Estamos haciendo un estudio ahora mismo para atraer y retener talento a las fundaciones, y conocer la situación laboral de los trabajadores. Y, por supuesto, queremos dar visibilidad a todo el trabajo que se realiza en estas fundaciones, porque no todo el mundo nos conoce y conocer nuestra labor es fundamental para lograr apoyo. 

Por último, ¿cómo dibuja el futuro de las fundaciones en España? ¿Cree que las empresas se convertirán en aliadas y acabarán por asumir su responsabilidad sostenibilidad social?

Creo que las fundaciones tienen un gran futuro, como aliadas tanto de las empresas como de las administraciones públicas. La sociedad del bienestar no se entendería sin ellas, pero, además, las fundaciones aportan recursos, conocimiento, especialización y experiencia en distintos ámbitos sociales, que las hacen imprescindibles en la sociedad actual y en la del futuro.