La economía circular está cobrando especial importancia en las agendas corporativas. La circularidad fomenta no sólo la aparición de nuevas oportunidades de inversión, sino también la mejora de competitividad de las empresas ya que reduce los costes y riesgos asociados al uso de recursos naturales y supone una oportunidad para abordar los desafíos ambientales.
Desde 2018, las conversaciones sobre este concepto se han triplicado y son una muestra de cómo las organizaciones, gobiernos y sociedad manifiestan su interés en cambiar la forma en la que utilizan los recursos y gestionan los residuos. Sin embargo, en el mismo periodo de tiempo, la proporción de materiales secundarios (reciclados, reutilizados remanufacturados...) consumidos por la economía global ha disminuido del 9,1% al 7,2%.
El Grupo de Acción de Economía Circular de Forética ha analizado en su informe ‘¿Cómo podemos acelerar el camino a la circularidad?’ los motivos y barreras que podrían estar frenando el camino hacia modelos circulares. La publicación, presentada este jueves en el ‘VII Circular Economy Business Forum’, también profundiza en las palancas que contribuyen a superar dichas barreras, como el desarrollo de nuevas herramientas, la ayuda de la inteligencia artificial o la creación de alianzas.
Para acelerar el proceso de trasformación de una economía lineal a una circular, es fundamental un cambio significativo por parte de diversos agentes, desde las empresas que necesitan adaptar su oferta de productos y servicios hasta los gobiernos que deben implementar regulaciones específicas, pasando por la responsabilidad ciudadana de reflexionar sobre sus decisiones de consumo.
El ‘VII Circular Economy Business Forum’, evento organizado por Forética en el marco del Grupo de Acción de Economía Circular, contó con la participación de Marta Gómez Palenque, directora general de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, quien explicó los principales avances de la Estrategia Española de Economía Circular y el importante papel de la colaboración público-privada para su implementación.
Por su parte, representantes de las 14 empresas que forman parte del Grupo abordaron las soluciones de innovación puestas en marcha en sus compañías para acelerar la transición circular. El ecodiseño, la colaboración entre distintos tipos de organizaciones, la creación de marcos comunes o la concienciación y comunicación responsable son algunos ejemplos de iniciativas corporativas que contribuyen a alcanzar un modelo de producción y consumo sostenible y circular.