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El papel de las empresas, crucial

¿Tiene solución el cambio climático?

¿Tiene solución el cambio climático? Esta cuestión ha cobrado una importancia crítica en la actualidad, sobre todo, ahora que se está celebrando la COP29 en Bakú, Azerbaiyán, en la que líderes mundiales y expertos se reúnen para discutir soluciones y estrategias para frenar el avance del cambio climático. Las empresas podrían tener la clave a esta pregunta si implementan soluciones efectivas que aborden esta crisis de manera integral.

Las empresas tienen un papel fundamental, no solo a la hora de mitigar su impacto ambiental, sino también al liderar la adopción de soluciones al cambio climático que promuevan un futuro sostenible.
Las empresas tienen un papel fundamental, no solo a la hora de mitigar su impacto ambiental, sino también al liderar la adopción de soluciones al cambio climático que promuevan un futuro sostenible.

¿Es posible frenar el avance del cambio climático? Esta es una de las preguntas más urgentes y cruciales de nuestro tiempo. Con el aumento de las temperaturas globales, el derretimiento de los glaciares y los eventos climáticos extremos cada vez más frecuentes, la humanidad se enfrenta a un desafío sin precedentes.

La respuesta a la pregunta es: Sí, es posible frenar el cambio climático. Sin embargo, para lograrlo debemos implementar soluciones efectivas que aborden esta crisis de manera integral. El calentamiento global ya está teniendo un impacto significativo en nuestro planeta. Sin embargo, según el sexto informe del IPCC, aún tenemos la oportunidad de limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ºC si alcanzamos las emisiones netas cero para 2050 y reducimos drásticamente los gases de efecto invernadero.

En este contexto, las empresas tienen un papel fundamental, no solo a la hora de mitigar su impacto ambiental, sino también al liderar la adopción de soluciones al cambio climático que promuevan un futuro sostenible. Desde la transición hacia energías renovables y la economía circular, hasta la innovación en tecnologías limpias, existen diversas estrategias que pueden marcar una diferencia real.

¿Qué pueden hacer las empresas?

A través de estrategias sostenibles y acciones medibles, las empresas pueden liderar el cambio hacia un modelo más responsable. Cinco soluciones clave que pueden implementar para combatir el cambio climático y reducir su impacto ambiental son:

  1. Establecimiento de objetivos de reducción de emisiones basados en la ciencia (SBTi): Definir metas claras y basadas en evidencia científica es crucial para orientar las acciones de sostenibilidad. La iniciativa Science Based Targets (SBTi) proporciona a las empresas un marco riguroso y medible para alcanzar la descarbonización. En España, 184 empresas ya se han comprometido con estos objetivos, lo que les permite avanzar de manera estructurada hacia un futuro de cero emisiones netas y comunicar su compromiso con el clima de manera transparente y efectiva.
  2. Descarbonización de procesos y operaciones: La reducción de la huella de carbono en las operaciones internas y en la cadena de suministro es una medida directa para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Descarbonizar implica hacer cambios estructurales, como optimizar el consumo energético, implementar energías renovables y minimizar los residuos.
  3. Implementación de medidas de economía circular: La economía circular permite que los recursos se mantengan en uso durante más tiempo, reduciendo la demanda de nuevos materiales y, en consecuencia, las emisiones asociadas a su extracción, producción y transporte. Este enfoque contribuye a la reducción de residuos y al ahorro de energía. Iniciativas como el reciclaje de residuos electrónicos (e-waste) y la reutilización de materiales minimizan el volumen de recursos extraídos y reducen las emisiones de gases de efecto invernadero.
  4. Gestión sostenible de la cadena de suministro: el 80% de las emisiones de la empresa están relacionados con su cadena de suministro. Al trabajar con proveedores comprometidos o promover una cadena sostenible, las empresas reducen sus emisiones de alcance 3 y se adelantan a futuras regulaciones ambientales.
  5. Inversión en innovación tecnológica: La tecnología es clave para combatir el cambio climático ya que permite desarrollar soluciones que reducen el consumo de recursos, mejoran la eficiencia energética y minimizan los residuos.

Situación de la acción empresarial

Las empresas en España están avanzando hacia una mayor sostenibilidad ambiental, como refleja el hecho de que el 55% ya haya implementado políticas medioambientales o que prácticamente la mitad mida su huella de carbono. Además, la economía circular y las energías renovables están ganando relevancia en las estrategias empresariales. El 47% de las empresas aplican procesos circulares, y un 57% se enfoca en energías limpias. La innovación tecnológica es un factor clave, con el 33% de las empresas aplicando nuevas tecnologías para sostenibilidad.

Sin embargo, las empresas españolas siguen enfrentando desafíos en materia climática como:

  1. Falta de estrategia: Según el estudio Implantación de la Agenda 2030 en las empresas españolas, el 45% de las empresas españolas aún no cuenta con una estrategia formal sobre cambio climático, lo que indica un amplio margen de mejora en la acción climática empresarial.
  2. Gestión de emisiones de alcance 3: mientras que un 48% de las empresas mide su huella de carbono en los alcances 1 y 2, solo el 20% lo hace en alcance 3. Esta falta de supervisión en la cadena de suministro, crucial para cumplir objetivos climáticos, se ve acentuada por la reciente Directiva europea de diligencia debida, CSDDD, que exige mayor transparencia ambiental en todas las actividades.
  3. La diferencia entre grandes empresas y pymes es notable: mientras el 69,5% de las grandes empresas están comprometidas con la reducción de emisiones, solo el 32,7% de las pymes tiene compromisos similares.

Beneficios empresariales

El compromiso empresarial con el cambio climático es una inversión hacia un futuro resiliente y competitivo. Las empresas que adoptan medidas sostenibles fortalecen su reputación, captan a consumidores conscientes y aseguran su posición en un mercado global cada vez más regulado. Entre los principales beneficios de un compromiso climático destacan:

  1. Reducción de costos operativos: la adopción de energías renovables y la optimización de recursos generan ahorros significativos en los costos operativos a largo plazo.
  2. Atracción de inversión sostenible: los inversores valoran cada vez más a las empresas con una estrategia climática robusta. Los fondos de inversión sostenible están en crecimiento, lo que representa una oportunidad de financiación para empresas responsables.
  3. Cumplimiento de normativas medioambientales: las políticas ambientales son cada vez más estrictas en todo el mundo. Las empresas que se anticipen a estos cambios mediante prácticas sostenibles evitarán sanciones y se beneficiarán de incentivos regulatorios.
  4. Beneficios económicos: como indica ODS, Año 8, Rentabilidad económica y Agenda 2030, contribuir en materia de medioambiente impacta positivamente en la rentabilidad de mercado. De hecho, un 60% de los consumidores prevé gastar más en productos sostenibles en el futuro y está dispuesto a pagar un 10% más por productos con bajo impacto ambiental, según un estudio de Bain & Company.

En conclusión, es necesario un liderazgo sostenible y sólido en la búsqueda de soluciones contra el cambio climático.